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2019
Un niño sostiene un pequeño loro antes de una presentación escolar en la plaza central de Sarayaku durante las festividades de la Pachamama.
2016
Penélope Santi toma un baño en el río Sarayakillo antes de ir a la escuela. Las aguas de este afluente, junto con las del río Rotuno, son especialmente limpias.
2017
Un niño duerme en un campamento de cacería previo a la celebración del Uyantza Raymi. Previo a esta celebración, hombres y niños a partir de lo 9 años de edad, se adentran por varias semanas en las profundidades de la selva para cazar y pescar. Los alimentos serán ofrecidos para toda la comunidad durante los 4 días de festejos.
2016
Niños de la familia Aranda Gualinga descansan en su casa con su tucán y mono. Ellos viven en Molinos, una comunidad localizada dentro del territorio de Sarayaku pero que no le pertenece administrativamente. Esta comunidad no es tan desarrollada como Sarayaku y apoya la exploración y explotación de hidrocarburos en su territorio.
2016
Niñas juegan con uno de los grifos de agua lluvia que tiene la comunidad. Esta agua es recopilada y almacenada en tanques ubicados en una de las montañas adyacentes para luego ser transportada mediante tuberías a la mayoría de hogares de la comunidad.
2019
Jhonzu Machoa sostiene una cartera durante el atardecer en uno de los caminos junto al río Bobonaza.
2019
Niñas sostienen a un bebé en brazos. Es común que las hermanas mayores sean las encargadas de cuidar a sus hermanos recién nacidos.
2019
Tati Huiti se mece en la hamaca de la cocina mientras su abuela, doña Magdalena Santi prepara la cena.
2016
Niñas conversan durante un receso en una de las escuelas primarias de Sarayaku.
2016
Niños juegan en el río Bobonaza. Este río es la principal vía que conecta a Sarayaku con la ciudad más cercana que es el Puyo. El viaje toma alrededor de 5 horas río arriba en un bote a motor.
2015
Dyana Malaver sostiene la cabeza de un venado que su padre cazó la noche anterior a orillas del río Rotuno. La comunidad toma de la selva lo estrictamente necesario para su subsistencia y lo aprovecha todo: la carne y entrañas del animal serán utilizadas como comida, la piel para construir tambores, el pelaje y las plumas para vestimentas festivas.
2019
Un joven con su espalda pintada wituk. Durante festividades importantes, la gente suele pintarse la cara, manos y cabello con este pigmento. Los diseños varían, pero generalmente en los dibujos masculinos se observan figuras geométricas de líneas gruesas que emulan texturas naturales, como la telaraña en este caso. En la antigüedad estos diseños servían para infundir miedo durante batallas. Hoy se los utiliza en eventos festivos y protestas sociales.
2019
La caza y la pesca son actividades primordiales para la supervivencia. Desde los 8 años de edad, los varones acompañan a sus padres en estas labores.
2017
Un joven Sarayaku utiliza un sombrero del que cuelga un sol de madera pintado con wituk durante el primer día de festividades del Uyantza Raymi o Fiesta de la Caza. Este artículo fue hecho por él mismo y representa a uno de los astros más importantes en la cosmovisión Kichwa.
2017
Retrato de Yaku Machoa mientras juega con hojas y ramas en la plaza central del pueblo en la noche. Yaku, quien es albino, utiliza las hojas como pieles de animales, imitando las tradiciones de los mayores que visten pieles auténticas después de la cacería.
2019
Shayanna Santi juega con el celular de su madre Andrea Cuji mientras ella levanta los platos después de cenar. Sarayaku cuenta con un punto de acceso satelital a Internet, el comúnmente llamado Wayusa Net, desde donde se divulga información de la comunidad. acerca de la comunidad.
2019
Elección de la Sumak Warmi (mujer principal) durante la fiesta de la Pachamama. Las participantes tienen un promedio de 18 años y son elegidas a partir de su conocimiento de la historial local.
2019
Un árbol de chonta, cuya madera es de las más duras de la Amazonía, es adornado con regalos para las mujeres de Sarayaku durante la fiesta de la Pachamama. Para obtener esos regalos, ellas tienen que talar el árbol con un machete. A cada una le es permitido darle un machetazo y así se turnan entre todas las mujeres del pueblo. La mujer, cuyo machetazo sea el que tumba al árbol, tiene el derecho de ser la primera que elije su regalo.
2016
Andrea Cuji con su hija Shayanna en brazos cerca de la chacra familiar. Las chacras son pequeñas parcelas de tierra en medio de la selva en donde cada familia cultiva alimentos para su consumo. Entre los cultivos más populares están el plátano verde, que sirve como acompañante a casi todas las comidas, y la yuca, indispensable para la preparación de la chicha.
2016
Una avioneta se prepara para despegar desde la pista de Sarayaku. El vuelo entre Sarayaku y la ciudad de Shell toma alrededor de 30 minutos. La forma de transporte más común entre Sarayaku y la ciudad sigue siendo el bote a motor.
2019
Irapay Santi descansa después de haber jugado con una bota de caucho de su madre. Debido a la humedad y abundancia de insectos, este tipo de botas son indispensables para caminar en la selva.
2019
Humberto Santi esconde su cara de la luz de una linterna. Debido a su aislamiento de la red nacional de electrificación, en la comunidad de Sarayaku, la electricidad es proporcionada principalmente por paneles solares, y en menor medida, por pequeñas plantas de combustión a gasolina y baterías.
2019
Lesli Cisneros rumbo a un evento familiar en su escuela. Su maquillaje elaborado con wituk mezcla ilustraciones geométricas y de astros en su frente, con técnicas de maquillaje tradicional occidental alrededor de sus labios.
2019
Una niña juega en un árbol junto al Bobonaza durante una tarde calurosa. Este río es la principal vía de conexión de la comunidad con la ciudad de Tena.